Las políticas de identidad digital ponen en riesgo la privacidad y los ingresos de artistas independientes del entretenimiento para adultos.

Las leyes de verificación de edad, que ya comenzaron a aplicarse en varios países de Europa y Norteamérica, han generado gran preocupación entre creadores queer y trans. Las normas exigen que los usuarios y productores de contenido validen su identidad con documentos oficiales o datos bancarios, una práctica que, según activistas, podría aumentar el riesgo de discriminación y exposición no deseada.

Muchos artistas independientes aseguran que no cuentan con la infraestructura tecnológica para cumplir con las nuevas reglas, y temen que sus ingresos disminuyan drásticamente. Además, advierten que el proceso de verificación puede comprometer su seguridad, ya que obliga a compartir información sensible con empresas que no siempre garantizan anonimato ni protección de datos.

Colectivos LGBTQ+ dentro de la industria del entretenimiento adulto han solicitado a los gobiernos revisar estas leyes y promover soluciones inclusivas. La discusión sigue abierta: ¿cómo equilibrar la protección de menores sin sacrificar la libertad y seguridad de los creadores?