Sí, leíste bien. No respira, no duerme, no tiene un cuerpo físico… pero tiene fans, cobra en dólares y vende contenido exclusivo por suscripción. Se llama Aitana López, es española (al menos eso dice su biografía) y es la primera influencer 100 % digital en monetizar como modelo de contenido personalizado.
Diseñada por una agencia creativa con inteligencia artificial, Aitana tiene su perfil en redes sociales, posa en ropa deportiva, responde mensajes directos y ofrece material extra para quienes se suscriben a su perfil privado. Y no, nada de esto lo hace una persona detrás del teclado: es una IA que aprende, simula y genera nuevas publicaciones automáticamente.
¿Qué vende exactamente?
Fotos "realistas", generadas con IA, con ropa sugerente.
Mensajes privados, respuestas emocionales y contenido limitado para fans premium.
Incluso… fotos personalizadas según el gusto del cliente.
Hasta ahora, sus creadores reportan ingresos mensuales de más de 4.000 euros (y creciendo). La noticia ya dio la vuelta al mundo y abrió el debate:
¿Esto es competencia desleal o evolución digital?
Mientras algunas modelos humanas sienten que compiten con un algoritmo perfecto, otras ven la oportunidad de usar IA para potenciar su propio contenido. Porque si una inteligencia puede hacerlo… ¿por qué no usarla a tu favor?
En un mundo donde los vínculos, los gustos y el deseo se digitalizan, la línea entre lo real y lo virtual se vuelve cada vez más borrosa. Pero una cosa es clara: el contenido personalizado no es solo el futuro… es el presente.